15 de mayo de 2010

Austen



Si sus sentimientos siguen siendo los mismos dígamelo, mi afecto y mis deseos no han cambiado, pero una sola palabra suya me hará silenciar para siempre. Sin embargo, si sus sentimientos han cambiado debo decirle que ha embrujado usted mi cuerpo y mi alma, y que le amo, le amo y le amo y que ya nada podrá separarme de usted.