7 de septiembre de 2011

Relatos de verano (1): Cantabria

Comienzo hoy la sección de verano que ya dije en la anterior entrada que iba a estrenar. La semana de Salou con las siete amigas os la podeis encontrar aqui Es una buena forma de reorganizar todo lo que ha pasado estos meses que estaba sin internet y disfrutando de la vida, el sol, el aire libre, la playa, las fiestas... Qué horror estar ya en zaragoza! Aun quedan unos días antes de empezar lo que creo que sera el curso más difícil de mi vida, e intento apurar todo lo que puedo :( . Pronto me pondre a trabajar en Caddilac 101, que ya tengo el tercer capitulo a medias pero necesito unos dias para reubicarme. Ohh.. ¿he dicho ya que pronto empiezan las clases? Joooooooooder...


Empezamos directamente por mi viaje familiar a Cantabria, ya que ya os podéis imaginar como fue mis días en Salou con las amigas (y no es plan de recordarlo y echarlo mas de menos). Fue a primeros de julio, una semana entera con mis padres y mi hermano de aventura con el tomtom. Era la primera vez que utilizábamos un GPS y menudas risas y broncas tuvimos. Pero sobrevivimos, que es lo que cuenta ^^! Fuimos a un hotel de Noja, cerquita de la playa y puedo dar fe de que el agua del atlántico está riquííííísima, por lo menos en esa playa. El agua era clara, con menos sal de la que estoy acostumbrada y la arena fina y marrón. Sería de un kilometro y medio de largo y con poca gente, cosa que no se puede ver en Costa Brava. Me acuerdo perfectamente de su contorno porque en el hotel había varios cuadros impresionantes y me gustaba mirarlos por la noche mientras tocaban jazz tres chicos. Aunque solo fuimos dos días a la playa, el resto los aprovechamos recorriendo cada rincón de Cantabria. Visitamos Fuente Dé, en los Picos de Europa, un sitio increíble,








Potes, dónde había un tenebroso, siniestro y muy recomendable museo de tortura y brujería,   las Cuevas del Soplao, preciosas y donde me compre un collar de ámbar que ahora llevo a todas partes,




Santander, un poco nublada, pero bonita, Laredo dónde cayeron algunas compras, y San Vicente de la Barquera, lugar en el que comimos muy bien y nos dvertimos mucho.





El último día aprovechamos para ir a la playa y meter todo en la maleta. A la vuelta, aprovechamos para detenernos un poco en San Sebastian y comer en Pamplona, que coincidía con los San Fermines. ¡Madre mía, como esta Pamplona en fiestas! Me he prometido que volveré algun año con los amigos, y os lo recomiendo a vosotros también. Además, me fijé como llamaban los vascos a Zaragoza, y más gracia no me pudo hacer. Es que somos unos chulos, joder xD...

ZARAGOZAKO!

(La nueva plantilla de blogger me tiene un poco desubicada, no sé donde puede ver las nuevas actualizaciones de los blogs que sigo, pero prometo que me pondré al día con todos!)

1 :

Itimad dijo...

Pinta bien ^^ Pero me queda una dudilla... cómo has sobrevivido sin tecnología toooodo ese tiempo? Yo me habría muerto! (no comments). Me alegro de que hayas vuelto, se te echaba de menos... No sabía que eras de Zaragoza :D (eres de Zaragoza, no? xD). Yo soy de Seville (alias: la otra punta de España donde no vive nadie T.T). Sí, soy yo la del blog de LJDH xDD Sin comentarios, ese día me aburría mucho xD
Waaa, Vic ha vuelto *feel like i'm stupid*
Me despido ya, que cuando me enrrollo y me pongo pesadita...
Saludoos!